A medida que crecen las preocupaciones sobre los posibles efectos dañinos de las redes sociales sobre los niños, aumentan también las herramientas para regular lo que ven (y lo que no ven) en la web y cuánto tiempo navegan por ella.
El uso de la tecnología en casa a menudo suele ser un tema de disputas familiares.
Hay filtros de control parental (programas informáticos específicos para filtrar contenido) que llevan años en el mercado, pero algunos padres sienten que no saben lo suficiente de tecnología como para activarlos adecuadamente. «Internet puede ser una gran fuente de información, pero también puede ser el Salvaje Oeste para los niños. No nos parecería bien dejar a los niños en el parque por la noche cuando son pequeños. De la misma manera, no deberíamos pensar que está bien que naveguen por internet sin guías ni restricciones», explica – Anne Longfield(del Comisionado de los Niños para Inglaterra, en Reino Unido). Los filtros de contenido también tienen algunas desventajas. Por ejemplo, algunos no funcionan cuando el celular de tu hijo ya no está en la casa y no usa esa conexión wifi. Y no funcionan si desconectan el wifi o usan datos móviles para acceder a internet.
Ben Halpert, fundador de Savvy Cyber Kids, una institución para educar sobre ciberseguridad con base en Estados Unidos, advierte que existen límites a lo que la tecnología puede hacer por sí misma. «No importa la tecnología que uses, nunca evitará que tu hijo se exponga a cosas que no desearías. Por eso es tan importante crear confianza con tus hijos y hablar de manera continua sobre el uso de la tecnología». La educación y la negociación son tan fundamentales como los ajustes técnicos cuando se trata de mantener seguros a tus hijos en internet.